Los hermanos Saavedra Nande (bailarín uno y artista visual el otro) se unen para crear esta performance cuyo dilema es urgente en la Cuba actual: la crisis que se agudiza mientras el discurso oficial y mediático normaliza. Los artistas recurren a vídeos auténticos de cubanos que abandonaron su país para mostrarnos la tragedia del éxodo masivo. Satirizan además a los medios de comunicación profesionales y su estrategia de comunicación que consiste en suplantar las crisis por ficciones. En escena, los actores van desarrollando una performance extraña y sorprendente hecha de retazos, movimiento, expresividad.

Según los hermanos Saavedra, la base teórica de esta producción se basa en el concepto de “Hipernormalización” que se refiere a la paradoja de la vida en la Unión Soviética durante el último período comunista antes del colapso, cuando todo el mundo sabía que el sistema estaba cayendo pero nadie podía imaginar una alternativa al status quo, así que tanto los políticos como los ciudadanos se resignaron a mantener un falso funcionamiento de la sociedad. Esta farsa aceptada por todos se volvió real y a este efecto Yurchak llamó hipernormalización.